jueves, 31 de diciembre de 2009

Cambio de Tercio

La verdad que el año se está despidiendo como para salir a pasear La Ciudad con tanta agua. Busca uno refugiarse en un bar en búsqueda de un café si puede ser acompañado de la lectura de un periódico. Ya habrá momento para el balance del año, que siendo muy optimistas podríamos tildar de agridulce.

Hoy este visitante quiere aprovechar para celebrar con todos vosotros que estamos aquí cerrando otro año mas, y en las puertas de otro que esperemos que ante todo simbolice una vuelta a ese sentido común para hacer y deshacer, que cada vez tenemos mas perdido.

Pero ojeando este periódico, hoy me queda con una imagen, que pese a parecer banal, se puede cargar de simbolismo. Se ha presentado el cartel de toros de la Maestranza del año 2010. Ya otras veces he hablado de la esta magnífica colección pictórica que año a año se va completando, y que presume de contar con las grandes firmas de la pintura contemporánea. Este año la designación cayó en el sevillano Luis Gordillo.


Con una composición a modo de collage, el Cartel gustará mas o menos (a estas alturas seguro que tiene un mote ya), pero encontramos una obra acorde a la línea del artista. Esto ya es de aplaudir, ya que el pasado año, para más bochorno, vimos como el artista designado, Manuel Salinas, renegaba de sus principios, porque “quería seguir viviendo en Sevilla”. Yo desde aquí aplaudo a Gordillo, porque con su compromiso, aumenta mis ganas de vivir en Sevilla….que ya eran demasiados reveses últimamente.



Luego podremos entrar en disquisiciones de si toros o no, que tanto juego a modo de cortina de humo están dando en el final de este 2009. Me quedo con una interpretación cultural, de un enriquecimiento que viene al rescate de un próximo año, tras petardazos como el Cartel de Fiestas de la Primavera, o los recortes en el Teatro de la Maestranza.

Por supuesto no me olvido de otros aspectos sociales-económicos de la Ciudad, que son los que verdaderamente están apretando…pero aparte de los temporales y alertas amarillas, y simulacros de medallas de la Ciudad, ¿les están informando de algo que no sean buenos propósitos?

Este visitante desde aquí les desea que una buena entrada de año, tampoco es que vayamos a recibirlo a Puerta Gayola, pero esperemos que se le pueda realizar una buena faena.

miércoles, 23 de diciembre de 2009

Concierto de Navidad

Un Concierto de Navidad de la ROSS en el Teatro de la Maestranza. Sería una gran noticia para La Ciudad: que todos estos rumores acerca del recorte presupuestario de la ROSS y el Teatro de la Maestranza, se quedara a lo sumo en un ajuste de elementos superfluos. Finalmente el Ayuntamiento se desmarca de alcanzar las cifras de presupuestos anteriores y la calidad del programa la van a sufragar el resto de administraciones: Ministerio, Consejería y Diputación. Y digo la calidad, porque obviamente la cantidad menguará.

Respecto de la ROSS, aún no tenemos nada claro. Pero si le parece a este visitante muy significativo que el recorte presupuestario en tiempos de crisis haya llegado al mundo de la Cultura por la vía más directa. Quizás sea una lectura bastante simplista de deshacerse de todo aquello “accesorio”, pero resulta bastante flagrante que se ataque siempre por el mismo lado…desde luego una reducción de la Cultura no implica directamente una reducción de número de votos.

No deja de ser significativo, echando un vistazo al plan 5000 de inversiones para el año que viene, la barbaridad de partidas destinadas a mantenimiento y a terminar obras ya iniciadas, con imposibilidad presupuestaria de concluirse. El único apartado de Cultura es un Museo de Historia de Sevilla, que huele a Ley de Memoria Histórica. Sobre todo choca por los ideales que tanto airea el actual equipo de gobierno; una de las principales señas de identidad del Comunismo, fue el compromiso por poner la Cultura al alcance de todos. En ciudades con esta herencia es posible asistir a la ópera por apenas tres euros de entrada (como ocurre con la Ópera de Budapest). Es un servicio de la Ciudad, como la educación, o la sanidad.



Reflexionaba días atrás este visitante sobre estos asuntos, mientras disfrutaba de paseando de estas vísperas lluviosas y cuando se vio sorprendido por una Ciudad que parecía diluirse como una acuarela bajo la lluvia.



Metafórico o no, se componía a ojos de este visitante un cuadro Impresionista de inusitada belleza. La iluminación artificial fallaba parcialmente y ocasionaba cierta penumbra que creaba una visión diferente a la normal. Los aciertos en la transformación de la ciudad como la peatonalización de la Avenida, la incorporación de nuevos medios de transporte como el Tranvía o el Metro aparecían como manchas salpicadas de agua por todas partes.

Incluso los alrededores de la Plaza de la Encarnación tenían un aspecto romántico, desprovisto de su habitual gentío que rodea el mercado y la actividad comercial.



Al llegar a la Plaza Nueva un apagón inundaba toda la plaza; la luz solo provenía del sector Tetuán – Sierpes (aquel al que se le castigó sin alumbrado navideño); todo parecía una metáfora sobre una falta de luz en el gobierno de una Ciudad, en la que sale muy barato prescindir de la Cultura y, de paso, machacar la tradición.


Días antes esa misma plaza se animaba por un grupo de campanilleros que de forma espontánea creaba Ciudad, aquella que no componen los edificios, las calles, los medios de transporte, todas esas tradiciones, costumbres y elementos culturales que le dan un carácter.



Pero estos valores intangibles quizás no sean los que cuentan, que le vamos a hacer. Continuará este visitante con sus paseos, no sin antes desearles a todos una Feliz Navidad…aunque haya quien se empeñe en dar la Pascua.


¡Felices Pascuas!

miércoles, 16 de diciembre de 2009

"Alumbrabilidad"

Alumbrabilidad eficientemente sostenible. Así se puede denominar el alumbrado navideño que tenemos que sufrir un año mas en La Ciudad. Este visitante va a preferir estas Pascuas el paseo diurno o al atardecer para disfrutar del ambiente, que al nocturno navideño que conlleva soportar la lamentable iluminación con que han decidido engalanar nuestras calles.



Ya sabemos de sobra que mientras el alumbrado dependa de ”infraestructuras para la sostenibilidad”, lo que tendremos será una alumbrabilidad eficientemente energética y sostenible…por cables a los balcones. Como la demagogia está al servicio de la clase política que tenemos la enorme desgracia de sufrir, a ver quien es el artista que levanta la voz por que le parezca escaso –mas bien cutre- el alumbrado navideño…siempre aliñado con aquello de cuidarse de los excesos en tiempos de crisis.



Y claro, para que en tiempos de crisis vas a intentar impulsar el comercio, -el movimiento del dinero-, con unas calles que inviten a pasearlas…eso sería sucumbir al modelo consumista – capitalista origen de todos los males. Mejor limitarse a cumplir un mínimo, y pasar de largo, a fin de cuenta por aquí casi nadie levanta la voz.



Este año habrá un mínimo de iluminación en el sector Tetuán, Sierpes, Rioja. Pero lo habrá por gentileza de Diario de Sevilla, que ha evitado que este sector, en el que un poco todos vemos reflejados recuerdos de nuestras Navidades pasadas, quedara a oscuras. La justificación: una guerra abierta con los comerciantes de la zona.



Suerte que no ha tenido la calle Francos –una de las calles comerciales más antiguas de La Ciudad-, que ha sido castigada sin iluminación. Eso sí, este visitante se quita el sombrero ante la iniciativa de sus comerciantes de adornar la calle con flores de pascua e iluminación a base de velas y candeleros; invito desde este rincón a su visita.

Tampoco caigamos en la demagogia de que Sevilla somos todos y se ha repartido para abastecer al resto de los barrios. Todo ciudadano, todo comerciante, tiene derecho a este servicio, pero no a costa de sabotear la Historia de La Ciudad.



Quizás se haya tocado fondo. Con criterios estéticos, energéticos y de reparto social acertados, se puede crear un ambiente apropiado. Es una forma mas de hacer Ciudad: las situaciones efímeras también cuentan. El resultado actual es fruto de un desinterés supino a todo lo que tenga que ver con la tradición de esta Ciudad -religiosa o no-, y a una equivocación –intencionada o no- en la interpretación de lo que suponen estas fechas.

Sin intención de hacer sangre, aprovechando unos días que este visitante ha pasado por Madrid, traigo una serie de reflexiones e imágenes sobre la forma de hacer Ciudad efímera, de darle contenido a esa Ciudad física que es soporte de todo. Así cuando las cosas se estudian y se hacen con interés se puede conjugar los distintos preceptos que ahora inundan todo.

Como la eficiencia energética: el reglamento que regula la eficiencia de la iluminación navideña (de reciente aprobación) es de carácter estatal, no local. Quiere decir este visitante, que lo eficiente no necesariamente tiene que ser cutre. Es cuestión de inversión, de amortizar tras un estudio correcto de un sistema en concreto.



O la temática del alumbrado (cuanto llevamos viendo campanitas y copitos de nieve). Pueden tener lugas temáticas o símbolos de todas clases: la Navidad, va más allá de una celebración religiosa. Se celebra la llegada de año nuevo, o cualquier encuentro de confraternidad, que esto, en los tiempos que corren, ya es bastante.





Y sobre se debe buscar un diseño, una coherencia y un interés en hacer Ciudad. Incluso en tiempos de crisis…quizás cuando mas falta haga. Nada que ver con nuestra alumbrabilidad eficientemente sostenible.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

¿Nazarenos?

Mala cosa. En este puente de la Inmaculada hemos tenido de todo en La Ciudad. Quien haya pasado el puente por aquí habrá comprobado la cantidad de gente que abarrotaba el Casco Histórico. Y la oferta era variada, observaba este visitante en la noche de la Vigilia de la Inmaculada, este ambiente prenavideño, salpicado de grupos de tunos y, como algo excepcional, bandas de cornetas y tambores. La combinación era perfecta…alguien añadirá que también estaba el aliciente de cruzarse con “la Cameron” o “el Cruise” ¡casi ná!

Ya se ha posicionado este visitante otras veces a cerca de la labor y el mérito de las bandas de música de procesional, incluso me parece interesante que se organice un congreso nacional. Todo sea por consolidar este estilo de música y sus agrupaciones.

Lo que me chirría un poco es el desfile que, como colofón al Congreso, reunió a más de 80 bandas por el centro de La Ciudad. Y no el hecho en sí, ya que resulta lógico que este tipo de composiciones se interpreten “andando”, que es para lo que están concebidas. Lo que me preocupa mas es la evidente muestra de banalización de nuestra Semana Santa y sus valores. Unos valores que apenas se ven tras una gruesa capa “kofrade”, que entorno a la figura del costalero (o costaleros “figuras”), las “agrupatas” y solos de corneta interminables, los convierten en un espectáculo que demanda cada vez mas dosis de protagonismo.

Uno de los puntos fuertes del desfile era participación de la banda de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Linares, cuya aportación particular fue que sus músicos vestían el hábito nazareno. Y efectivamente, en un desfile con Majoretes, con interpretaciones de marchas de ordinario -mas identificable con la Cabalgata del Ateneo-, apareció un tramo completo de nazarenos, solo que en vez de cirios color tiniebla, llevaban instrumentos musicales.

No tuvo este visitante la “suerte” de verlos en acción, pero lamentablemente, si presenció la organización del cortejo, en la que, como integrantes de cualquier otra banda, merodeaban por los bares -y sus aseos- de los Jardines de Murillo. Esto, que en Linares será mas normal (siempre desde el respeto a esta Hermandad), particularmente me parece alarmante, y degrada la imagen de nazareno, equipara esta vestimenta a un uniforme mas.



Quizás había que presenciar esta situación con otra mentalidad. Pero la única conclusión clara que tengo es que se le ha hecho un daño importante a la ya de por sí maltratada figura del nazareno.

Siempre he reivindicado al Hermano nazareno como la esencia emocional de la Semana Santa. No hay más verdad, ni mas penitencia, que en esos Hermanos que –bajo el anonimato- acompañan a sus Imágenes, sin importarles no verlas en todo el camino. Muy por encima del furor costaleril, que tanto ha menguado los tramos de nazarenos, reclutando dobles y triples cuadrillas. No puede existir más Semana Santa debajo de una trabajadora o tras un banderín, que tras el antifaz de un nazareno.

Pero definitivamente no corren buenos tiempos para buscar la esencia. Ayer esa sensación de emoción al ver el primer nazareno del Domingo de Ramos, fue torpedeada por una banda disfrazada con un hábito. No es la primera vez; hace un año una cámara de seguridad delataron que es más fácil robar bajo una túnica, y hasta pude presenciar a un “cani-nazareno” tomándose una cervecita en el Tremendo con sus colegas antes de su Estación de Penitencia (afortunadamente duramente reprendido por un gran Ciudadano de los que pocos quedan). Ayer fue una piedra mas en este muro de banalización que entre todos estamos construyendo o permitiendo que se construya, en torno a nuestra Semana Santa.

De nuevo el contrapunto: por culminar una idea buena, como ha sido este Congreso, hemos vuelto a vender otro cachito de la esencia mas pura de La Ciudad…y aún habrá quien lo aplauda.